septiembre 20, 2007

No me olvides



-No me olvides- Fueron las ultimas palabras que Astrid leyó al acostarse, se quedo mirando el techo de su cuarto unos minutos, pensando en aquellas letras… - sería imposible olvidarle - pensó.
Olvidar su voz que susurra alivio y esperanza, sus manos que endulzan y salvan mi piel, sus ojos que desnudan y consuelan. ¡Imposible! – Balbuceo – mientras su vista encontraban reposo observando su imagen y llevándolo con ella en el más profundo y eterno sueño…

septiembre 17, 2007

Razón y Piel

Soy esclava de mis huellas
Camino en la soledad de mi voz,
Dueña del silencio que ansia ser atendido

Expresar es el más sutil y cruel suicidio
La caída es fuerte
Déjate llevar…

Mi piel obedece al corazón
Mis sentidos se funden. Son uno solo
Mi razón me abandona

Me regocijo en la efusión
Dos distintos
Misma piel, nula conciencia…

septiembre 12, 2007

Tinta

El buró necesitaba ser abierto y dejar escapar las letras que guardaba tiempo atrás, volaron por la habitación buscando un mejor refugio. Tinta derramada consolaba el corazón de un joven perdido en un mundo real; la fantasía buscaba una ventana para contaminar los alrededores. El joven se levanto, busco en su mochila, encontró un ciento de hojas blancas, las colocó en el piso, la tinta haciendo letras buscaron el papel, hermosos pero tristes versos se compusieron; lágrimas brotaron inundando el lugar, palabras plasmadas huían de la humedad, volaron creyendo no encontrar abrigo en aquel sitio, letras negras goteaban, se deshacían, el buró estaba abierto, las palabras se refugiaron de nuevo, el cajón se cerro para no dejar escapar sentimientos hechos letras, que aún no estaban listos... para ser leídos…

septiembre 05, 2007

Vicio del pasado



La mirada se fija en el cielo convertido en imán. La sonrisa se desdibuja con la luz incierta que no permite ver más allá del dolor… Volteas la mirada en busca de una sensación de alivio… Nadie recuerda la última vez que sonreíste, tus ojos no encuentran consuelo, tu voz no es la misma, tus gritos llegan al rincón más oscuro de aquel callejón del cual no te interesa salir. Estas aquí, la miras, no la reconoces, los recuerdos se han esfumado; no te das cuenta y vives en una nube de añoranza y necedad… Han pasado siglos desde aquel encuentro, Adriana te ha olvidado, su corazón se mudo. Es tiempo de voltear, sigue y aférrate a la vida que sin querer te has construido. Ana te ama, vives a su lado, construyen un futuro, es fresca y real, pero insistes en aferrarte al recuerdo. Adriana es tu vicio, un pasado que ya no existe, te quedas indefenso ante su imán, ante aquella imagen de la cual no queda ni un solo rastro, entiende, no es la misma, jamás lo será… ella ahora es libre y al mismo tiempo prisionera de otro amor, de su propio vicio…