septiembre 24, 2008

Otoño mío


Entró el otoño y sigo sin sentir sus aires; por qué insiste en no pasar a mi lado... me ha defraudado muchas veces, no encuentro la estación que alivia mis dolores, ahora sólo tengo recuerdos fríos de otoños lejanos, de vientos felices, sueños acariciados, esperanzas terminadas... no me esforzaré más por retener tus hojas secas, ahora quiero esperar la primavera con sus flores nuevas y aromas delicados.

Tú, sí, tú, otoño ingrato que vienes con la intención de secar mi vida, la de los míos, no es la primera vez, no te conformas, no quieres soplar y se quedan aquí tus ansias de secarlo todo, tu sed de ser diferente, quizá envidas al inviernos o al verano, pero acaso no te das cuenta que con tus vientos alivias almas, renuevas principios...

Hoy te empiezo a odiar, han sido muchos recuerdos punzantes. Mi persona favorita te la llevaste otoño, mi vida se secaba en un otoño, mi amor lo alejo el otoño y ahora, ahora intentas desbordad tu ira de mi... no lo hagas, te lo suplico, no conviertas tus vientos en soledades, no intentes llevártela, ella ha olvidado sus dolores hace mucho por qué resonarlos, ya lo conocemos, lo conozco bien, déjame seguirte queriendo, otoño mío, comprende que amo tus hojas marrón, tu olor dulce, tu color ocre, tu aire libre... libre... libre...

2 comentarios:

Anónimo dijo...

el otoño es sequedad, viento y soledad... es frio, es café, es transición...
lamentablemente cuando el otoño llega a nuestra vida es fin y tristeza... solo nos queda a que pase y algun dia llegue la primavera...

Arturo J. Flores dijo...

Te entiendo. A mí, fue la primavera (en estricto sentido fue el invierno, pero sus últimos días, cuando ya sale el sol) quien se llevó a mi persona favorita.
Por eso odio las flores.